- Coincidieron los escritores Eduardo Antonio Parra, Beatriz Espejo y Patricia Vega
- En la mesa redonda con la que se inició la serie de actividades para festejar el centenario del natalicio de la autora de Los recuerdos del porvenir
Después de Sor Juana Inés de la Cruz, Elena Garro (1916-1998) es la mejor escritora no solo de México, sino también de Latinoamérica. En lo anterior coincidieron los escritores Eduardo Antonio Parra, Beatriz Espejo y Patricia Vega, quienes la noche del martes 8 de marzo participaron en la primera de una serie de actividades para festejar el centenario del natalicio de la autora de Los recuerdos del porvenir.
En la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, la periodista y poeta Patricia Vega dijo que Garro encierra muchos misterios porque, entre otros aspectos, “fue una mujer que vivió fuera del tiempo de los relojes”.
- Coincidieron los escritores Eduardo Antonio Parra, Beatriz Espejo y Patricia Vega
- En la mesa redonda con la que se inició la serie de actividades para festejar el centenario del natalicio de la autora de Los recuerdos del porvenir
Después de Sor Juana Inés de la Cruz, Elena Garro (1916-1998) es la mejor escritora no solo de México, sino también de Latinoamérica. En lo anterior coincidieron los escritores Eduardo Antonio Parra, Beatriz Espejo y Patricia Vega, quienes la noche del martes 8 de marzo participaron en la primera de una serie de actividades para festejar el centenario del natalicio de la autora de Los recuerdos del porvenir.
En la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, la periodista y poeta Patricia Vega dijo que Garro encierra muchos misterios porque, entre otros aspectos, “fue una mujer que vivió fuera del tiempo de los relojes”.
Señaló que en este año en el que se conmemorará a Elena Garro “se pueden resarcir muchas omisiones que hemos tenido con esta narradora y dramaturga”.
Por su parte, Eduardo Antonio Parra apuntó que Garro es, posiblemente, la escritora mexicana más controvertida del siglo XX, debido a varios factores, como su fallido matrimonio con Octavio Paz, sus frecuentes exilios, sus disputas con colegas y sus supuestas traiciones, “pero lo que importa es su impresionante obra literaria.
“Bordeando el genio y la locura, Elena Garro dejó una obra literaria poderosa, original, apasionante, cuyos hallazgos temáticos y formales continúan influyendo en los escritores y escritoras que la sucedieron y cuyas historias siguen comentándose, estudiándose y disfrutándose como si apenas acabaran de ser publicadas”.
Agregó que la novelista, cuentista, dramaturga, guionista, articulista, cronista, poeta y coreógrafa tuvo diversas inquietudes que la ayudaron a abordar diversos géneros creativos, incluso algunos fuera de la literatura, y que legó a las letras de nuestro país una obra abundante, versátil, variada y desigual por necesidad.
Consideró que aunque Garro únicamente hubiera escrito la novela Los recuerdos del porvenir y el cuento La culpa es de los tlaxcaltecas, pasaría a la historia como la más alta narradora mexicana del siglo XX. “Ambas obras hubieran sido suficientes a la autora para estremecer durante décadas a lectores, escritores, críticos y comentaristas. Sus obras despiertan fascinación permanente.
“Tanto en esa novela como en ese cuento aparecen una voz personal e inconfundible, narradores que dan la impresión de venir más allá del tiempo y de la realidad, y que al transmitirnos sus historias arrastran siglos de experiencias dolorosas como si no hubieran hecho otra cosa en la eternidad que girar en torno a un puñado de problemas sin solución, en busca de una felicidad inalcanzable, para terminar instalados en una suerte de desencanto trágico semejante a la tristeza.
“La voz de la autora, sus narradores y personajes es lo primero que llega a estremecer a los lectores de su obra, debido en gran parte a la intimidad que consigue establecer con quien la escucha.
“Dicen los que la conocieron que Garro tenía una voz tenue, aguda, susurrante, pero sumamente seductora, que atrapaba de inmediato a sus oyentes. Si es así, estamos frente a una verdadera hazaña retórica, ante un acto sublime, ante una narradora que pudo reproducir las sensaciones que provocaba el sonido de su voz en sus textos escritos”, concluyó Parra.
Elena Garro, la mejor escritora de Latinoamérica después de Sor Juana Inés de la Cruz. Coincidieron los escritores Eduardo Antonio Parra, Beatriz Espejo y Patricia Vega. En la mesa redonda con la que se inició la serie de actividades para festejar el centenario del natalicio de la autora de Los recuerdos del porvenir, la noche del martes 8 de marzo en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.