o El martes 6 de diciembre a las 11:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia
“El cuento y la narración oral son en mi vida algo profundo que me ayuda a salir adelante. Además, como a mis 77 años se empiezan a olvidar las cosas, con la narración hago mucho ejercicio de la memoria”, compartió en entrevista María Sotomayor Jiménez, integrante del taller de narración oral para adultos mayores del ciclo Temprano cuentan los abuelos.
Organizado por la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes y el Foro Internacional de Narradores Orales (FINO), Temprano cuentan los abuelos es un espacio que ofrece a los adultos mayores una participación inclusiva en la sociedad. Durante 2016 se han realizado 22 sesiones: el segundo y el cuarto martes de cada mes, siempre a las 11:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.
Algunos miembros del taller, como María Sotomayor, asisten constantemente a Temprano cuentan los abuelos porque lo consideran lugar en el que pueden conversar y contar sus experiencias, ya sea en una evocación de la memoria o una ficción que leyeron o escucharon. A decir de Armando Trejo Márquez, director del FINO, este ciclo permite a los adultos mayores recobrar, a través de la conversación, un sitio que han ido perdiendo.
“El prototipo de la realidad es la oralidad, la conversación cotidiana. Cuando nosotros contamos historias frente a un público, dimensionamos esa charla con una intensión artística, y ellos, desde esta posición, recuperan también el espacio en la familia, en la comunidad y en su entorno”, señaló Trejo Márquez en entrevista, y resaltó que la mayoría de los asistentes son jubilados, hombres y mujeres, de entre 70 y 83 años de edad.
“Llegué invitada por una amiga y cuando oí a las narradoras me gustó muchísimo. Por eso me quedé en el taller. Estoy orgullosa de estar aquí. Mis compañeros son muy amables y exitosos. Yo aquí me siento como en un mundo mágico. Narrar me hace sentir maravillosa, aunque a veces tengo errores, como es natural, pero me siento, de todas maneras, muy contenta”, expuso María Sotomayor.
En la última sesión del año de Temprano cuentan los abuelos, la cual se llevará a cabo el martes 6 de diciembre, los adultos mayores compartirán sus historias para revivir el invierno y así recibir el año nuevo con el mismo entusiasmo con el que cuentan sus anécdotas, como María Sotomayor: “Yo nunca estuve en una actividad así. Sí acostumbro a leer. Era maestra de primaria, así que a mis alumnos les narraba cuentos también, además de las enseñanzas. Eso me ayudó a desenvolverme mejor. Aprovecho mi experiencia para seguir narrando”.
Los abuelos sufren discriminación porque se cree que ya no dan más, agregó Armando Trejo. Sin embargo, aseguró que, en cuestiones artísticas, sobre todo en oralidad, son quienes tienen más acervo y memoria para compartir. Por tal motivo, en el taller que forma parte del ciclo se les prepara con las herramientas teóricas y técnicas necesarias para que tengan mejor desenvolvimiento.
“Este taller nos ayuda muchísimo: a tener buena memoria, a relacionarnos y a tener seguridad para convivir con otras personas. Ojalá que mucha gente se anime a venir, porque verdaderamente es maravilloso”, concluyó María Sotomayor.