- El volumen editado por el escritor japonés Noé Yamahata se presentó en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes
Como un homenaje póstumo al poeta zapoteca Macario Matus, en el 80 aniversario de su natalicio, se presentó Una mirada a la esperanza, cuya coordinación editorial estuvo a cargo del escritor japonés Noé Yamahata.
En la actividad, realizada la víspera en Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, el editor comentó que el volumen reúne cuatro investigaciones de Mayra Matus, Feliciano Carrasco, Zoila Juárez y de él mismo. “Son cuatro acercamientos a la labor y vida del poeta, ensayista, periodista cultural, político, narrador y crítico de arte”.
Expresó que Matus, quien nació en Juchitán, Oaxaca, en 1943, y murió en 2009, fue un incansable defensor de su lengua y de la historia del pueblo zapoteca, autor de más de 30 libros en diferentes géneros y un gran promotor de la enseñanza de la literatura y las artes en el Istmo.
El también editor alertó que, al igual que otros idiomas, como el arameo, el zapoteca está en peligro de extinción.
En su oportunidad, la escritora Zoila Juárez señaló que se tiene contemplado presentar dicho libro en Japón, en el que Yamahata “narra las andanzas de su amigo, como si fuera un Sancho Panza honrando a un Quijote zapoteca”.
Apuntó que Matus escribió sobre muchos temas, escritores y artistas, como Jorge Luis Borges, Francisco Toledo, Rufino Tamayo, Jesús Urbieta, Demián Flores y otros, pero lo mejor de todo es que nunca cuestionó su origen ni su identidad. Se creía descendiente de franco-iraníes que llegaron a México con la ocupación francesa.
Matus fue humilde, cariñoso, cauteloso, humorista y un guerrero rebelde que en 1981, representando a la disidencia política, ganó la presidencia municipal de Juchitán.
Juárez recordó también tres aspectos del poeta oaxaqueño: fue un zapoteca ejemplar para las futuras generaciones, declamaba poesía como nadie y merece esta frase de Alfredo Cardona Peña: “Cuando un poeta (como él) nace, muere el odio en el mundo”.
El ensayista Juan Bravo Zamudio dijo que Matus, como pocos hombres de su estirpe, han desplegado un sentido del humor iluminado con tanta creatividad e ingenio.
Por su parte, la poeta Irma Pineda Santiago, por medio de un texto leído por su hijo Sebastián Ávila Pineda, comentó que el libro hace justicia a Macario Matus sobre una faceta poco referida de este escritor juchiteco, la de periodista cultural.
Lo calificó de “colibrí de esplendorosa pluma” y sostuvo: cada día lo descubro y lo reconozco porque cada día inventa algo nuevo, algo que surge de esa imaginación abundante, terrible, incansable, feroz. Esa imaginación que heredó de los antiguos padres.
Toda la mitología fantástica ha estado presente en los zapotecas de ayer y de hoy para crear una peculiar obra artística, y fue el caso de Matus, un erotómano empedernido. Es el escritor más prolífico que ha dado el Istmo de Tehuantepec, añadió.
Dijo que, además de ser un hombre cultural completo, fue muy querido por su pueblo y un auténtico precursor de la cultura oaxaqueña y universal. “En general, Matus es un poeta zapoteca tocado por la divinidad”.
Al final, el músico Feliciano Carrasco interpretó creaciones zapotecas para amenizar la presentación del libro.