o En la presentación de su libro Por las fronteras de Europa. Un viaje por la narrativa de los siglos XX y XXI
o El jueves 1 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia
Por las fronteras de Europa. Un viaje por la narrativa de los siglos XX y XXI es un compendio de ensayos en los que Mercedes Monmany revisa la creación literaria contemporánea del viejo continente. En una conversación con Anamari Gomís, la ensayista y crítica literaria española presentará este volumen el jueves 1 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.
En los ensayos que componen el libro, Monmany profundiza sobre las fronteras y las lenguas de alrededor de 320 autores europeos, entre los que se encuentran: John Banville (Irlanda), Julian Barnes (Reino Unido), Patrick Modiano (Francia), Orhan Pamuk (Turquía), Italo Svevo (Italia), Czes?aw Mi?osz (Polonia), Isaak Babel (Rusia), Knut Hamsun (Noruega), Wolfgang Koeppen (Alemania), Mihail Sebastian (Rumania), Danilo Kiš (Serbia) e Imre Kertész (Hungría).
o En la presentación de su libro Por las fronteras de Europa. Un viaje por la narrativa de los siglos XX y XXI
o El jueves 1 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia
Por las fronteras de Europa. Un viaje por la narrativa de los siglos XX y XXI es un compendio de ensayos en los que Mercedes Monmany revisa la creación literaria contemporánea del viejo continente. En una conversación con Anamari Gomís, la ensayista y crítica literaria española presentará este volumen el jueves 1 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.
En los ensayos que componen el libro, Monmany profundiza sobre las fronteras y las lenguas de alrededor de 320 autores europeos, entre los que se encuentran: John Banville (Irlanda), Julian Barnes (Reino Unido), Patrick Modiano (Francia), Orhan Pamuk (Turquía), Italo Svevo (Italia), Czes?aw Mi?osz (Polonia), Isaak Babel (Rusia), Knut Hamsun (Noruega), Wolfgang Koeppen (Alemania), Mihail Sebastian (Rumania), Danilo Kiš (Serbia) e Imre Kertész (Hungría).
La autora, en entrevista para la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes, comentó que este libro es una guía privada —no canónica— de temas, escritores, momentos históricos, países o facciones que bien pudo llevar por título Una española viajando por las fronteras de Europa. Si la lectura siempre se inicia con un viaje, son años de lecturas y pasión por la lengua y la literatura los que conforman las cartas náuticas de Monmany.
“El hecho de atravesar fronteras continuamente también alude a algo de mi vida. La familia de mi madre era francesa. Yo vivía en Barcelona y mi abuela francesa vivía justo al otro lado de la frontera. Durante generaciones habían sido propietarios de agencias de aduanas en la frontera de Francia con España, donde se producía un gran tráfico de mercancías, sobre todo a través de trenes. Con mis hermanos íbamos de forma frecuente a casa de mi abuela, tomando el tren en lo que se llamaba, y se llama aún, Estación de Francia, en Barcelona”, compartió.
A Mercedes Monmany le interesa la geopolítica de su continente, porque en sus viajes de España a Francia, y viceversa, pudo observar desde pequeña la diferencia entre un lado y otro de la frontera: “Mis hermanos y yo íbamos desde un mundo no libre —la dictadura de Franco— a uno democrático —la Europa libre—, el que yo, como niña, percibía como más bello, luminoso, deseable. Eso producen las dictaduras: un tono gris, sombrío, triste, abatido, que no se podría precisar en qué, pero que siempre es diferente al de los países libres.
“También en casa de mi abuela, la biblioteca hablaba de temas desconocidos para los del ‘otro lado’ de la frontera, para los españoles: libros acerca de la Grande Guerre —la Primera Guerra Mundial—, en la que los españoles no habíamos participado. Nosotros, en cambio, habíamos tenido una Guerra Civil.
“Quizá desde esa niñez mía que atraviesa fronteras, arrancó la curiosidad por profundizar en las diferencias europeas, por abolir fronteras a través de la cultura, de la lectura, de conocernos unos a otros. Para mí no existe un norte y un sur, un este y un oeste. En la cultura todo se anula; es una escuela de tolerancia y diálogo”.
Refirió Monmany que desde muy joven se interesó por el esplendor de la literatura de los países del centro y del este de Europa: “Tanto húngaros como polacos, checos o balcánicos, yo los había leído intensamente, muchas veces a través de traducciones francesas. En países como España normalmente estaban muy poco difundidos, de forma injusta, tengo que decir. Habían influido, por supuesto, las condiciones políticas que los tuvieron encerrados al mundo exterior durante décadas, pero también una escasez de traductores y de interés editorial durante un tiempo”.
A decir de Monmany, los bloques de autores en distintas lenguas no siguen directrices de tipo político: “Introduje varios apartados (autores en lenguas yiddish y hebrea del actual Israel, por un lado, y Turquía y Rusia, por otro), que considero indispensables para entender el devenir de la cultura europea del siglo XX, y del actual, en su conjunto”.
Mercedes Monmany ha realizado una importante labor como promotora cultural y crítica literaria, y desde esa visión escribió los ensayos que componen este libro: “Me considero sobre todo una lectora y divulgadora de lo que creo mejor, más interesante y apreciable de la literatura. En ocasiones lo que recomiendo puede coincidir con el parecer o no del que ha leído a ese autor o ese libro. Lo importante es que no se pierda la curiosidad, el interés por conocer, incluso estilos, escuelas artísticas o literarias que no siempre coinciden exactamente con nuestros gustos.
“La narración acerca algo que se ha escrito anteriormente y que me ha dado la pauta para ese determinado comentario o reflexión, como si se estuviera hablando con un amigo o con alguien que se encuentra por la calle. Mi intención siempre ha sido que mis ensayos, críticas y escritos en general de literatura sean leídos por lectores comunes, no necesariamente académicos o ‘iniciados’ en teorías, escuelas o métodos en boga de cada momento, o de hace unas décadas.
“Aunque no soy escritora de ficción o poeta, siempre me he esforzado en escribir de la forma lo más atractiva posible, manteniendo un ritmo, como si fuera una narración”.
Monmany manifestó su admiración por los escritores mexicanos y considera publicar un próximo volumen dedicado a España e Hispanoamérica.
“México, en concreto, tiene no solo grandes genios y maestros de la literatura, sino escritores de fama universal que para personas de mi generación en España han sido fundamentales como introductores de lujo de las literaturas más diversas: Octavio Paz, Carlos Fuentes, Sergio Pitol. Por tanto, sus lectores han tenido grandísimos maestros que, en otros lugares, por diversas causas históricas difíciles de resumir, no hemos tenido”, finalizó.