- El miércoles 4 de mayo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes
- La acompañarán Armando Alanís, Eduardo Cerecedo, Lucía Rivadeneyra y Andrés Cisneros
- El ser humano está extraviado en su mundo; esta época en la que vivimos es un laberinto: Marlene Villatoro
La poeta chiapaneca Marlene Villatoro presentará su nuevo libro, Configuraciones de la memoria, en el que realiza una búsqueda estética de la conciencia del hombre a través del ejercicio lúdico del lenguaje y la estructura de la palabra poética. Los escritores Armando Alanís, Eduardo Cerecedo, Lucía Rivadeneyra y Andrés Cisneros, como moderador, la acompañarán el miércoles 4 de mayo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes.
En este volumen, Marlene Villatoro (1949) dibuja un cuadro en cada poema, y así logra plasmar una historia en la que describe al mundo de los tiempos modernos. La autora critica la pérdida de los valores y del sentido de la colectividad, así como el déficit de comunicación entre los seres humanos a causa de un conjunto de miserias que abarcan todos los aspectos de la condición humana, desde el egoísmo, la envidia y la violencia, hasta el abuso desmedido de la tecnología.
- El miércoles 4 de mayo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes
- La acompañarán Armando Alanís, Eduardo Cerecedo, Lucía Rivadeneyra y Andrés Cisneros
- El ser humano está extraviado en su mundo; esta época en la que vivimos es un laberinto: Marlene Villatoro
La poeta chiapaneca Marlene Villatoro presentará su nuevo libro, Configuraciones de la memoria, en el que realiza una búsqueda estética de la conciencia del hombre a través del ejercicio lúdico del lenguaje y la estructura de la palabra poética. Los escritores Armando Alanís, Eduardo Cerecedo, Lucía Rivadeneyra y Andrés Cisneros, como moderador, la acompañarán el miércoles 4 de mayo a las 19:00 en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes.
En este volumen, Marlene Villatoro (1949) dibuja un cuadro en cada poema, y así logra plasmar una historia en la que describe al mundo de los tiempos modernos. La autora critica la pérdida de los valores y del sentido de la colectividad, así como el déficit de comunicación entre los seres humanos a causa de un conjunto de miserias que abarcan todos los aspectos de la condición humana, desde el egoísmo, la envidia y la violencia, hasta el abuso desmedido de la tecnología.
“El ser humano está extraviado en su mundo; esta época en la que vivimos es un laberinto. En este libro configuro la memoria: expongo cada pasaje, cada tipo de hombre y, luego, en la última sección, ese ser se renueva; hay una esperanza”, compartió Marlene Villatoro en entrevista con la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Para Villatoro, la vida es como la historia del personaje mitológico Sísifo, quien, por engañar a Hades, fue condenado a subir una roca hasta la cima de una montaña y, cada vez que llegaba a la cúspide, la piedra volvía a caer. “Sísifo está subiendo su piedra, está dando todo de sí. El esfuerzo se le ve en las manos, en las venas. Esa es la vida. Estamos viviendo y haciendo todo lo que podemos. Al llegar a la cima, la maldita piedra se cae y vuelve a bajar lento, amargamente, con todos los traumas y el coraje del destino que tiene”.
En el transcurrir del tiempo la vida se renueva, pero antes de hacerlo se debe conocer la miseria, agregó. “En su analogía sobre Sísifo, El mito de Sísifo (1981), Albert Camus dice que este personaje encuentra la felicidad al subir la piedra. Este hombre, en su terrible castigo, encontró la belleza de la vida. Pongo la figura de Sísifo, porque Configuraciones de la memoriaes una historia cuya voz clama por una toma de conciencia. Esa solicitud, ese grito, es tener conciencia de lo que estamos haciendo, pensar en realidad las cosas y no actuar automáticamente, porque somos seres humanos, no cosas”.
En la primera parte de Configuraciones de la memoria, la autora describe la vacuidad del mundo, la desvalorización y la escisión del hombre y la naturaleza. Con una cita de José Saramago como epígrafe en la segunda sección, se refiere al mundo como una piedra redonda. Para la poeta podrán pasar miles de años, podrá desaparecer el hombre, pero la piedra, el mundo, allí estará. En el centro de la piedra está la historia de la humanidad como una metáfora del tiempo.
“La piedra es la historia; es una imagen que yo estoy dando. En vez de decir ‘mundo’ digo ‘piedra’. En mi obra busco la estética y la semántica; encontrar la palabra clave que dé diferentes connotaciones para que el lector, con su historia y sus conocimientos, la aplique, según su criterio, a su ser. La poesía que yo escribo hay que leerla a profundidad; dice muchas cosas. Hay poemas que parecen una obviedad, pero no: tienen un contenido muy fuerte que es consecuencia de lo anterior”.
Por su poemario Percepciones (1994), Marlene Villatoro fue reconocida en 1995 con el Premio Internacional de Poesía José Ortega y Gasset, en Madrid, España. Asimismo, obtuvo el primer premio en el decimotercer Concurso Internacional de Poesía de la Association Internationale La Porte des Poètes 2009, por Poemas sueltos. Otras de sus obras publicadas son:Pensamientos (1979), Gotea la vida (1988), Estigmas (1993), La culpa del origen (2000),Ofrendas y cascadas (2003), El misterio del Sumidero y Nacimiento.
“Algunas personas me han preguntado: ¿Dónde está el sujeto? El sujeto es la resonancia de la palabra. Mi poética se puede distinguir, según mis críticos, por el manejo de los sustantivos. No uso adjetivos más que los estrictamente necesarios. En el ritmo y en el sustantivo de la palabra es que yo hablo de los temas de Configuraciones de la memoria.
No represento al mundo, pero la connotación verbal es muy importante en este poemario”, finalizó.