Buenas tardes.

Saludo a:

Evodio Escalante

Víctor Roura

José Hornero

Armando González Torres

Alí Calderón

Desde luego a

Tomás Hidalgo,

Quien funge como moderador.

Así como a los actores:

Raquel Olmedo y

Roberto D'Amico.

 

Buenas tardes.

Saludo a:

Evodio Escalante

Víctor Roura

José Hornero

Armando González Torres

Alí Calderón

Desde luego a

Tomás Hidalgo,

Quien funge como moderador.

Así como a los actores:

Raquel Olmedo y

Roberto D'Amico.

 

Es un verdadero privilegio compartir este emblemático escenario con destacadas figuras de la poesía, el periodismo, la crítica literaria y la actuación, quienes se han dado cita para comentar la obra Retrato a Lápiz de nuestro apreciado amigo Dionicio Morales.

 

El árbol todavía tiene ganas de vivir. Se aferra al único sostén: su altura. Dionicio Morales. Porque la inspiración gobierna los numerosos rumbos de la creatividad, hay en esta vida hombres y mujeres que son como la ceiba de Tabasco; seres que hunden sus raíces de manera muy profunda en esta tierra inagotable. Y así viven, dando y recibiendo a cada momento, pero es tal su insobornable vocación de grandeza, tal su necesidad de expandir la savia que los anima, que van creciendo como si escalaran el aire en su tentativa por alcanzar el firmamento.

 

Y mientras se elevan, prodigan generosos su abundante sombra para deleite y descanso de los caminantes. Para fortuna de los tabasqueños, y para suerte de sus amigos y lectores de todas partes, una de esas personas es el maestro Dionicio Morales.

 

Un hombre que observa desde el asombro, lee desde la inteligencia y vuelve a ver el mundo con maravillada comprensión. Un narrador que escribe para retratar la realidad y, gracias al poder primigenio de la palabra, logra develar los claroscuros de nuestra mirada.

 

En ocasiones, las verdades contundentes corren el riesgo de convertirse en lugares comunes, aunque esto no disminuye su significado. Asumiendo esta circunstancia, quiero hacer algunas reflexiones con motivo del acto que hoy nos convoca y sobre el poeta que ha hecho posible este afortunado encuentro. Diré, por ejemplo, algo con lo cual estarán de acuerdo los presentes: Dionicio Morales ha hecho de la amistad y la fraternidad una profesión de fe, por eso entre sus allegados se encuentran los más representativos escritores de Hispanoamérica.

 

Son cercanos a él los más destacados artistas plásticos, los más influyentes periodistas de México, pero también infinidad de estudiantes, empresarios grandes y pequeños, asistentes a sus talleres literarios y funcionarios públicos de la mayor parte del país. Dionicio Morales es también un escritor fundamental de la contemporaneidad mexicana (uno de nuestros poetas necesarios, diría José Hornero). Creador de una dilatada obra que se ha convertido en un canto a la vida, conformado por diversas y melodiosas resonancias de paisajes, aromas y ámbitos de su tierra natal.

 

El maestro Morales es, además, un gran conocedor de la literatura y las artes plásticas, y comparte con nosotros su sensibilidad y su mirada luminosa. Por eso, como lectores, nos dejamos guiar por sus discernimientos, ya que es poseedor de una refinada educación visual y tiene una enorme capacidad para traducir a palabras el lenguaje de la pintura.

 

Dionicio rechaza con ahínco muy tabasqueño el término de "crítico"; mientras su quehacer ensayístico, su labor periodística, su artesanía de entrevistador y agudeza de cronista, contradicen su negación y marcan de forma particular el mundo de la cultura y el arte nacional.

 

En este sentido, es para mí un gran honor estar ante ustedes en nombre de los estudiantes, catedráticos y personal administrativo de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, para presentar un ejemplo del talento creador que hay en nuestra tierra.

 

Es también un gusto agradecerle a Dionicio Morales el que nos haya permitido editar el libro "Retrato a lápiz", que contiene una selección de su obra.

 

Tomando en cuenta la magnitud e importancia del quehacer creativo del autor que hoy nos convoca, consideramos que esta edición se convertirá en referente obligado de la cultura contemporánea de México, por varias razones. Por ejemplo, para los nuevos lectores, entre ellos por supuesto nuestros universitarios, es una inmejorable introducción al mundo poético.

 

Quienes ya conocen y disfrutan su trabajo, ahora tienen la oportunidad de recrearse con una selección de los momentos más significativos de su escritura. Y todavía hay otro aspecto que interesará a los lectores de todos los tiempos: en un sólo libro de poco más de 400 páginas, tenemos muestras de la obra de Dionicio Morales en sus diversas facetas.

 

Quiero destacar que esta publicación conlleva un excelente trabajo editorial, que estuvo bajo el cuidado de Luis Cortés Bargalló, y se enriquece con un texto de Carlos Pellicer, el prólogo esclarecedor de José Hornero y una selección de retratos realizados por Gonzálo Utrilla. Además de una sustanciosa antología poética analizada a detalle por José Hornero, "Retrato a lápiz" contiene los apartados: "Conjuros y divagaciones", una selección de crítica literaria en torno a autores como Carlos Pellicer, Pablo Neruda, Alí Chumacero, Efraín Huerta y Salvador Elizondo.

 

Se estudia también la obra de los tabasqueños José Carlos Becerra y Josefina Vicens, singular escritora que nació el 23 de noviembre de 1911, por lo que este año se conmemora el centenario de su natalicio. Encontramos asimismo, una selección de reflexiones en torno a las artes plásticas, "Música para los ojos", sobre autores como Diego Rivera y José Luis Cuevas, así como Gonzálo Utrilla, sin olvidar a los tabasqueños, representados por Leticia Ocharán y José Francisco.

 

La crítica de teatro lleva por nombre "Imitación de la vida", y aquí encontramos cavilaciones sobre dramaturgos fundamentales, como Sergio Magaña, Hugo Argüelles y Xavier Villaurrutia. En la sección de periodismo cultural, "Concierto para varias voces y un intérprete", podemos encontrar reunidos los textos sobre Juan Gelman, Gabriel Zaid, José Revueltas, Carlos Montemayor, Susana Alexander y la revista "Vuelta", entre otros.

 

Se comprenderá ahora por qué para la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco es un verdadero orgullo publicar este libro, que además hoy presentamos en uno de los espacios culturales más importantes del país. Por ello, permítanme agradecer al Instituto Nacional de Bellas Artes que nos abrió las puertas de este majestuoso recinto.

 

Para los universitarios tabasqueños, editar la obra escogida de Dionicio Morales, significa que cumplimos a cabalidad con nuestros compromisos ante la comunidad. Es decir, estamos formando a las nuevas generaciones de profesionistas, realizando trabajos de investigación, pero también efectuando labores que favorecen el acercamiento a todas las artes.

 

El quehacer cultural de la Universidad, del cual forma parte este proyecto editorial, se sustenta en el rescate, la promoción y la difusión de todas aquellas expresiones creativas que devienen del talento artístico y elevan el espíritu humano.

 

Por ello, agradezco nuevamente a todos los que participaron en la publicación de "Retrato a lápiz". Asimismo, al público que ha compartido con nosotros esta grata primicia. Y, de manera muy especial, reitero el reconocimiento de nuestra comunidad académica al poeta, al maestro, al amigo y paisano Dionicio Morales.

 

Nos congratula que el Fondo Editorial Universitario se enriquezca con esta obra, que retrata su andar desde la poética de la escritura al análisis de la cultura actual, en un viaje que constituye un deleite para los lectores.

 

"Estudio en la duda, acción en la fe".

 

Muchas gracias.