• Nuestra existencia está basada en la colectividad, afirmó
  • En el PBA se le rindió un reconocimiento por su obra y trayectoria
  • Ha logrado una diversidad de miradas literarias: Lucina Jiménez

 

En el reconocimiento que el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) le ofreció por su obra y trayectoria, la dramaturga, narradora y poeta Sabina Berman afirmó haber decidido quedarse con el teatro “de tiempo completo, porque me gusta estar en contacto directo con la gente”.

 

Fue en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes cuando la homenajeada  comentó que en la actualidad está escribiendo una novela a la que dedica de ocho a diez horas diarias pero, aclaró, “mi verdadera pasión es el teatro, porque nuestra existencia está basada en la colectividad.”

 

Además de la presencia entre el público de Stasia de la Garza, coordinadora nacional de Literatura del INBA, la dramaturga nacida en la Ciudad de México en 1956 estuvo acompañada por José Gordon, Cristina Rivera Garza, Lucina Jiménez y Héctor de Mauleón.

 

La promotora cultural Lucina Jiménez aseguró que Sabina Berman es una de las principales figuras de la literatura mexicana: “Lo más importante de este homenaje es que se le realiza a una escritora que está en su etapa más importante como creadora vital y contemporánea”, añadió.

 

Destacó que la autora de Entre Pancho Villa y una mujer desnuda, La Bobe La mujer que buceó dentro del corazón del mundo (su más reciente novela traducida ya a 13 idiomas con circulación en 33 países) ha logrado, como pocas, una diversidad de miradas literarias que van de la narrativa y la poesía a la dramaturgia, el cine y el periodismo cultural y político.

 

Berman “mira y escudriña cada rincón de la vida nacional”, consideró Lucina Jiménez, y subrayó también que, con sentido del humor e ironía, la autora “desconfía de todo discurso oficial y de toda violencia contra la vida de las personas y los animales: nos pone frente a los dilemas que vive la humanidad.”

 

De acuerdo con el periodista y escritor Héctor de Mauleón, a la creadora de la obra teatral Feliz nuevo siglo Doktor Freud le preocupa que los acontecimientos puedan ser imaginados y soñados por las personas de carne y hueso para cambiar, de alguna manera, la realidad.

 

Recordó que hace 20 años Berman le confesó en una entrevista que ejercía la imaginación, porque el mundo era una cosa que no entendía, pero que si la realidad se veía en un teatro, está por encima de ella.

 

Hizo hincapié en que a la escritora la ha tratado y admirado, entre otras cosas, por su despreocupación por el lenguaje, al que le hado libertad para reinventarse: “Mirar con paciencia la realidad es uno de los secretos de Berman”, dijo finalmente.

 

Luego de que la escritora Cristina Rivera Garza leyera una crítica constructiva en torno al libro La mujer que buceó dentro del corazón del mundo, el narrador José Gordon señaló: “Nos emociona por su visión del mundo y lo que está detrás de él: trata de conocerlo y entenderlo”.

 

“La pasión por el entendimiento –dijo-- es la mejor definición de la vida y obra de Sabina Berman, quien está ligada a la compasión y al deseo de trascender los límites”, concluyó, antes de tocar la guitarra y cantar un poema escrito por la dramaturga homenajeada.