Fue convocado por primera vez en 1978 por el Instituto Nacional de Bellas Artes y el Gobierno del Estado de Michoacán —por medio del Instituto Michoacano de Cultura, con el nombre de Primer Premio Nacional de Novela. En aquella ocasión, Víctor Sandoval, entonces titular de Promoción Cultural del Instituto Nacional de Bellas Artes, manifestó que la creación de dicho premio obedecía a la política de descentralización cultural hacia los estados de la República Méxicana.
El 8 de diciembre de 1978, Arturo Azuela recibió el Primer Premio Nacional de Novela por su obra Procesión de rencores, la cual, al publicarse en 1982, cambió el título a Manifestación de silencios. Al término de la ceremonia en donde se le entregó el premio, Arturo Azuela habló de la importancia del premio: “Yo creo que en primer lugar, uno ha sido juzgado. Eso es muy valioso. La actitud para entrar a un certamen de este tipo debe ser humilde, porque uno está dispuesto a perder, eso obliga entonces a perfeccionar la obra. Es de suma importancia la creación de premios literarios, porque esto viene a ser el reconocimiento para la diaria tarea del escritor”.
Posteriormente, el certamen adquiere el nombre de Premio Bellas Artes de Novela José Rubén Romero y actualmente es convocado por la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, y el Gobierno del Estado de Michoacán, por medio de la Secretaría de Cultura de Michoacán. A partir de la edición 2018, la convocatoria acepta, además de obras en español, trabajos escritos en cualquier lengua incluida en el Catálogo de Lenguas Indígenas Nacionales (CLIN).