*** Los catalanes y vascos no sólo fueron obligados a dejar su país, sino que además su cultura y su lengua
*** Este martes 16 de agosto en la sede de la Capilla Alfonsina

 

El Instituto Nacional de Bellas Artes y la Coordinación Nacional de Literatura, en la próxima sesión del ciclo: Si me quieres escribir… autores del exilio español en México presentan a la escritora Rosa María Durán Gili, quien ofrecerá la conferencia “Poetas catalanes exiliados en el país”, acompañada por Miguel Capistrán como moderador, este martes 16 de agosto de 2011 a las 18:00 horas, en la sede de la Capilla Alfonsina ubicada en la calle Benjamín Hill 122, de la colonia Condesa.

 

La presencia y aportaciones que los intelectuales y artistas españoles que llegaron exiliados a México en los años 40 es bien conocida. Provenientes de diferentes regiones y pueblos de España, cada uno con particularidades que marcaron su incorporación a la cultura mexicana.

 

 

Para darse una idea de la trascendencia que tuvieron los artistas e intelectuales catalanes para el desarrollo de las letras mexicanas, basta mencionar nombres como el del poeta Agustí Bartra o del filósofo y también poeta Ramón Xirau; el de editores como Bartomeu Costa-Amic; Fidel Miró, fundador de Editores Mexicanos Unidos; Joan Grijalbo, con la editorial que lleva su mismo nombre y la familia Espresate, creadores de Ediciones Era.

 

Sin embrago, el proceso de incorporación del exilio catalán a la vida mexicana fue un proceso con su propia especificidad y especialmente doloroso, pues, como explica en entrevista Durán Gili, los catalanes y vascos no sólo fueron obligados a dejar su país, sino que además su cultura y su lengua estaban amenazadas de muerte.

 

“Franco no permitía que se hablara en catalán, lo cual es cortarle a la gente su manera de vivir y expresarse, incluso corrían peligro de muerte quienes se manifestaban hablando en catalán. Quienes hablaban español, no tuvieron que hacer mayor esfuerzo, pues seguían expresándose en su lengua materna, mientras que para los refugiados catalanes no fue así. Sucedió, sobre todo, con los hijos de los refugiados catalanes, quienes a su edad tuvieron que aprender en México el español como una lengua extranjera, ellos no hablaban más que catalán, que era la lengua de sus padres. Sin embargo, la acogida que recibieron en este país fue tan cálida que les permitió adaptarse suavemente”, detalla la catedrática.

 

Aunque los poetas catalanes exiliados en México que escribieron y publicaron sus obras fueron numerosos, son poco conocidos, siendo Agustí Bartra quizá el más identificable. Sin embargo, como advierte la escritora, se puede mencionar una cantidad importante de poetas que escribieron y publicaron en su lengua materna, como Josep Carner, Agustí Cabruja en una primera generación y, en una segunda generación, Ramón Xirau y Manuel Durán Gili y después Marti Soler i Vinyes.

 

Como parte de esa necesidad de expresarse en su propia lengua, la comunidad catalana en México publicó una serie de revistas en su lengua, desde las cuales difundían su cultura y exponían los temas políticos del momento.

 

En algún momento se llegaron a contar hasta 15 revistas en catalán editas en México, entre éstas, como detalla Rosa María Durán Gili, algunas se dedicaron exclusivamente a la difusión de la poesía catalana.

 

“Las revistas Pont BlauAntología Poética fueron dedicadas básicamente a la publicación de poesía catalana. Se pueden citar otras revistas: Lletres, dirigida por Agustí Bartra; Quaderns del exili, dirigida por Juan Sales y Ferrán de Pol; La nostra revista, dirigida por Avelí Artís y Vicens Riera Llorca, y la Revista del Orfeó Catalá dirigida por Marti Soler i Vinyes. Además, Bartome Costa-Amic publicó una serie de antologías poéticas mínimas dedicadas a los poetas Maragall, Carner, Salat, Papasseit, Llorente, Alcover y Guasch”, resume la escritora.

 

Sobre las características y aportaciones de la lírica catalana escrita en México, como Durán Gili, es necesario detenerse en cada caso específico, pues cada uno de los poetas catalanes que escribieron en México realizaron aportaciones a la lírica, cada uno desde su estilo poético particular.

 

“Agustí Cabruja escribió básicamente en catalán una poesía lírica, muy fresca, misma cualidad que aparece en su obra en castellano. Otro caso es el de Manuel Durán Gili, quien tiene una obra extensísima, tanto en catalán como en castellano, entre otros, el titulado Poemas telegráficos”, explica.

 

Casi todos lo poetas catalanes escribieron en su lengua materna, aunque también lo hicieron en castellano. La excepción, explica la escritora, fue Ramón Xirau, quien, tiene una abundante obra escrita en castellano, pero toda su poesía es en catalán: “Ramón Xirau tiene una maravillosa obra filosófica, toda escrita en castellano, pero para escribir poesía reservó la lengua catalana”, concluye la especialista.

 

Rosa María Durán Gili. Nació en Barcelona, España. Cursó la carrera de letras hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM; su posgrado lo realizó en La Sorbonne, París. Recibió la medalla (colectiva) en homenaje al exilio Catalán otorgada por la Generalitat de Catalunya.