Gerardo Deniz: La multiplicidad poética
por Lourdes Salgado
En 2008, el poeta David Huerta se refirió al estilo literario de Gerardo Deniz de la siguiente manera: “eriza, es difícil, pero siempre enriquecedor en la multiplicidad de sus búsquedas: la química, el color, las mujeres, la reflexión, la mitología y la música. En fin, esa cosa llamada poesía, comprendida de una manera poco convencional: la suya”.
Gerardo Deniz –pseudónimo de Juan Almela– nació en Madrid en 1934, es poeta y traductor. Hijo de un político socialista y bibliófilo, heredó de éste el tono irónico. Después de su exilio en Ginebra, se trasladó junto a su padre a México en 1942 (donde radica actualmente). Contrario a lo que podría pensarse, su formación no fue en primera instancia literaria. Terminó la carrera de Química a los 17 años y anterior a esto, fungió como traductor de los autores Georges Dumézil y Roman Jakobson. Su desarrollo en el ámbito literario inició con sus colaboraciones en Biblioteca de México, El Semanario Cultural, Milenio y Vuelta. Fue becario del Fondo Nacional para la Cultural y las Artes (FONCA) en 1989 y miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte (SNCA) desde 1994. Su amplio conocimiento en el idioma ruso, alemán y turco le permitió trabajar como traductor de libros de Física, Química, Lingüística y Mitología en el Fondo de Cultura Económica y Siglo XXI. Sin embargo, Deniz nunca abandonó una de sus más grandes pasiones: la música. Para José María Espinasa, la obra poética de Gerardo Deniz es extraña porque habla de una relación poco convencional entre la escritura y la vida: “Pensar que esta escritura es fría y distanciada de la experiencia, es simplemente no entender nada; la experiencia está ahí todo el tiempo”. En la obra de Gerardo Deniz se puede apreciar propuestas innovadoras sustentadas en investigaciones, lecturas y conocimientos específicos de un tema. Este es el caso de Amor y oxidente (paráfrasis del estudio sobre Denis Rougemont: Amor y occidente), donde se observa un lenguaje conversacional con metáforas heterogéneas y cautivantes. Esta obra lo hizo merecedor del Premio Xavier Villaurrutia en 1991, cuyo jurado, en total concordancia, afirmó: “Gerardo Deniz es un poeta extraordinariamente arriesgado, que ha conmovido los cimientos y procedimientos de las formas habituales de hacer poesía”. En la poesía del autor de Ton y son, se observa principalmente un estilo narrativo que se opone a la abstracción mediante una visión texturizada y un acercamiento a las formas. Por medio de términos coloquiales se relaciona con el lector a través del humor, creando el asombro e interés en su lectura. No obedezco a ninguna teoría o idea previa. Es decir, mi obra tiene la ventaja de que está hecha siempre como me sale, sin pensar cuál será su efecto. Tampoco me preocupo si el poema es legible. En fin, no tengo ninguna manía por ese lado. Manía, por otra parte, que a menudo se llama pertenecer a una escuela u obedecer a tal o cual estética”, mencionó Deniz en alguna ocasión. No obstante, después de 40 años de mantener este gran esfuerzo literario, en 2008 le fue otorgado el Premio Especial de Poesía Aguascalientes por su trayectoria literaria. Al hablar de sus inicios como escritor y su formación poética, cabe señalar que Deniz tiene entre sus lecturas preferidas la obra de Dante Alighieri, Luis de Góngora, Charles Baudelaire, Fernando Pessoa, T.S. Eliot, Ramón López Velarde, José Gorostiza, Octavio Paz (en especial por Libertad bajo palabra y Águila o sol) Alí Chumacero, Eduardo Lizalde, Gabriel Zaid, Alfonso Reyes y Julio Torri. Sólo basta revisar su ensayística o su obra en prosa para advertir cómo aquí y allá hay estrategias discursivas que se han tomado prestadas de la poesía: sal de su discurso reflexivo, pimienta de su cuentística”, menciona David Huerta sobre Gerardo Deniz. A través de su acto poético, Gerardo Deniz muestra en su obra cuestionamientos humorísticos e irónicos impregnados de una actitud meticulosa entre el poema y el mundo, los individuos y lo que los rodea. Con esta interrogante es que, a pesar de ser un poeta tardío, se ha dirigido en la senda literaria con sus obras Adrede (1970); Gatuperio (1978); Mansalva (1987); Picos pardos (1987); Grosso modo (1988); Amor y oxidente (1991); Mundonuevos (1991); Op. cit. [plaquette] (1992); Ton y sonAnticuerpos (1998); Fosa escéptica (2002); Semifusas (2004); Erdera (2005); IMDINB (2006); Sobre las íes. Antología personal (2008); entre otras. (1996); Su obra más reciente, Sobre las íes, es una antología personal que reúne su trabajo desde una perspectiva entusiasta y divertida a través de la creación de imágenes retóricas. El poeta Eduardo Lizalde mencionó acerca de Deniz: “es un autor tan difícil para lectores en general, toda gran literatura es ilegible para el lector común, aun la aparentemente más accesible… El caso de Deniz es admirable, me parece un autor de una perfección, inteligencia, oído, de una cultura impresionante... Claro que es difícil leerlo, toda gran literatura es difícil. Sus lectores tenemos que explorarlo armados de diccionarios. Es un gran satírico, y hubiera podido escribir una poesía convencional: tiene una cultura formidable no solamente de literatura y poesía española sino de poesía y literatura de muchas otras lenguas; es un gran técnico y conocedor de la métrica universal. Lo que hizo fue renunciar a continuar un camino agotado. Todos los grandes poetas innovadores hacen lo mismo. Por eso me alegro que lectores tan cultos e inteligentes entren a la colosal obra de Deniz”.