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La poeta Dolores Castro, ganadora de premios, entre ellos el Nacional de Ciencias y Artes en el área de Lingüística y literatura 2014 y la Medalla José Emilio Pacheco 2016 por trayectoria, es una de las más reconocidas a nivel nacional e internacional y una de las personalidades más entrañables por su carácter afable y calidad humana.

La también narradora, ensayista y crítica literaria nació un 12 de abril en Aguascalientes. “Sólo tengo buenos recuerdos de las presentaciones tanto mías como de gente que quise mucho, mis compañeros, como Jaime Sabines, Rosario Castellanos, gente muy valiosa”, afirmó la escritora Castro Varela, quien recordó que la lectura de su primer libro la realizó en el Palacio de Bellas Artes al lado de su esposo Javier Peñalosa Calderón.

El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) ha reconocido su trayectoria en diversas ocasiones: en 2008, en 2014 y en enero de 2019 fue reconocida en el ciclo Protagonistas de la Literatura Mexicana por su aportación a la poesía nacional.

Integrante del grupo Ocho Poetas Mexicanos, conformado por Alejandro Avilés, Roberto Cabral del Hoyo, Javier Peñalosa, Honorato Magaloni Duarte, Efrén Hernández, Octavio Novaro y Rosario Castellanos, también ha recibido el Premio Nacional de Poesía Mazatlán 1980 por el poema ¿Qué es lo vivido? y el Premio Iberoamericano de Poesía Ramón López Velarde 2013.

Autora de poemas como El corazón transfiguradoSoles¿Qué es lo vivido?No es el amor el vueloSonar en el silencioÍntimos huéspedesAlgo le duele al aireViento quebrado: poesía reunida, Sombra domesticadaPozo de luz, también incursionó en la novela con La ciudad y el viento y en el ensayo con el texto La dimensión de la lengua en su función creativa, emotiva y esencial.

Dolores Castro estudió Derecho y la maestría en Letras modernas en la UNAM; Estilística e Historia del arte en la Universidad Complutense de Madrid; Lingüística y literatura en la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y Radio en el Instituto Latinoamericano de Comunicación.

Dos galardones llevan su nombre, el Premio Estatal de Poesía Dolores Castro, que otorga el Instituto Tlaxcalteca de Cultura y el Premio Dolores Castro de Narrativa y Poesía Escrita por Mujeres, que concede el ayuntamiento de Aguascalientes, a través del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura. En 2018 el Fondo de Cultura Económica inauguró una librería con su nombre en la ciudad de Aguascalientes.

“Es una obra monumental la de la maestra Dolores Castro, nos enseña sobre el buen hacer poético, la pasión por la palabra, a encontrar en la poesía un punto de enseñanza”, afirmó la escritora Roxana Elvridge-Thomas.

“Para la maestra Lolita la palabra poética es aquello que nos enseña, que nos llena de asombro, de alegría”, añadió la autora de poemas, ensayos y artículos publicados en revistas y suplementos culturales del país y del extranjero.

Señaló que a pesar de que no ha tenido el gozo de pertenecer al grupo de alumnos del taller que imparte Dolores Castro, “he tenido la fortuna de considerarme su amiga, nos conocemos desde hace años y hemos coincidido en diferentes espacios y en la vida. He aprendido de ella en el ejercicio de la amistad, se puede aprender mucho con las pláticas, es un asombro y un placer conversar con ella, tiene buen humor y una charla maravillosa y afable, pasa de un tema a otro, tiene una memoria maravillosa”.

Por su parte, la poeta y ensayista Mariana Bernárdez indicó: “Sigo celebrando tu vida y tu poesía, ambas entrañables y entrañadas en el altísimo secreto del misterio”.

Señaló que la obra de Castro es “poesía del asombro y de la hondura, que afinca su opulencia en lo cotidiano, atisbo de quien tiene los ojos arrebatados por la vida y que registra lo pequeño como rostro de lo sublime: ahí donde pareciera que el polvo ni siquiera repara, detrás del alba que se desliza, el resplandor derrama su hallazgo”, concluyó la escritora, quien leyó algunos de sus poemas preferidos de Dolores Castro para despertar el interés de quienes aún no la conocen.