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o   El viernes 1 de julio a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia

 

o  Conversará con Armando Alanís y Elizabeth Hulverson

En su novela Mexiko, James Martell cuestiona el origen e inicia un recorrido por los laberintos del lenguaje, a través de una cuidadosa construcción acústica de letras y personajes. Armando Alanís y Elizabeth Hulverson acompañarán al narrador mexicano en la presentación de este volumen, el viernes 1 de julio a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.

 

Mexiko es un novela que, más que narrar una historia, intenta experimentar con el lenguaje. Aunque sí hay un protagonista, quien, al principio, parece que va narrando una historia sobre su vida y sobre un encuentro amoroso, la novela va más allá de eso; es un juego que va desdibujando o consumiendo la propia trama”, explicó en entrevista Sidharta Ochoa, editora del libro.

 

o   El viernes 1 de julio a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia

o  Conversará con Armando Alanís y Elizabeth Hulverson

En su novela Mexiko, James Martell cuestiona el origen e inicia un recorrido por los laberintos del lenguaje, a través de una cuidadosa construcción acústica de letras y personajes. Armando Alanís y Elizabeth Hulverson acompañarán al narrador mexicano en la presentación de este volumen, el viernes 1 de julio a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.

Mexiko es un novela que, más que narrar una historia, intenta experimentar con el lenguaje. Aunque sí hay un protagonista, quien, al principio, parece que va narrando una historia sobre su vida y sobre un encuentro amoroso, la novela va más allá de eso; es un juego que va desdibujando o consumiendo la propia trama”, explicó en entrevista Sidharta Ochoa, editora del libro.

 

El volumen cuenta con ilustraciones de Isai Tapia y ha sido publicado por Abismos Casa Editorial. A decir de Ochoa, el autor juega con las palabras para darle cierta tonalidad y ritmo a la narración. Indicó que los juegos fonéticos son evidentes en los nombres de los personajes y de los lugares, como en el caso del protagonista, que va de Osckhar a Osckar. Asimismo, resaltó que las preguntas y los juegos lingüísticos le sirvieron a Martell para describir a un personaje obsesivo, que tiene muchas manías y tics con respecto a la escritura.

 

“La pregunta por el origen se refiere a cómo el personaje dibuja su historia personal a través de esta compleja trama y juego con el lenguaje. A su vez, desdibuja su propia historia: más que construirla, borra en este extraño personaje todos los rastros que quedan de una biografía personal, aunque sí hace evocaciones del lugar, que es Ciudad Satélite, donde nació el autor. Aquí hay ciertas reminiscencias de los espacios de la ciudad, pero sin ser propiamente una biografía o una historia narrada de manera tradicional”.

 

En la contraportada del volumen, la académica Judith Ruiz-Godoy escribió: “La visceralidad mental de la historia invita a la relación escatológica entre palabra, espacio y cuerpo; un ordenamiento del cosmos según Osckar. Desde la escisión emprende una búsqueda de la hipótesis, la teoría, el libro último, la inexorable historia; mostrándonos una cartografía del camino, un recorrido del fin último: nombrarse”.

 

Sidharta Ochoa concluyó: “Siempre estuve muy interesada en editar libros de corte experimental, que se arriesgaran un poco con las ideas, con el juego del lenguaje. Mexiko es un volumen complejo, muy atractivo para la gente que le interesa la literatura, la filosofía en general y las vanguardias literarias, y aporta, desde su propia trinchera, interrogantes sobre la literatura y el lenguaje. Tiene razón Judith Ruiz-Godoy al afirmar que se trata de una pregunta sobre la literatura desde la filosofía. Es una novela muy densa y, sin duda, prevalecerá por su elegancia”.