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Asimismo, la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, dijo durante su arribo al velatorio donde familiares y amigos despidieron al escritor, que las instituciones culturales "nos sumamos a la pena que embarga a las letras mexicanas y a la familia de Ignacio Padilla, lamentamos la pérdida de un gran autor en plena madurez creativa. Todos estamos consternados”.

 

Agregó que la instancia que encabeza organizará un homenaje en fecha que acordarán con sus familiares. “En la Secretaría de Cultura, a través de la Dirección General de Publicaciones, hay un proyecto de reedición de algunos de sus títulos. La mejor manera de recordarlo es precisamente impulsando que se lea su gran obra”.

 

Asimismo, la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, dijo durante su arribo al velatorio donde familiares y amigos despidieron al escritor, que las instituciones culturales "nos sumamos a la pena que embarga a las letras mexicanas y a la familia de Ignacio Padilla, lamentamos la pérdida de un gran autor en plena madurez creativa. Todos estamos consternados”.

Agregó que la instancia que encabeza organizará un homenaje en fecha que acordarán con sus familiares. “En la Secretaría de Cultura, a través de la Dirección General de Publicaciones, hay un proyecto de reedición de algunos de sus títulos. La mejor manera de recordarlo es precisamente impulsando que se lea su gran obra”.

En este sentido, el secretario de Cultura Rafael Tovar y de Teresa instruyó a Marina Núñez, directora general de Publicaciones, para que se edite un antología de narrativa breve del autor.

 

“Hace aproximadamente dos semanas, Ignacio Padillaestuvo en la Sala Manuel M. Ponce, dentro del ciclo Protagonistas de la literatura mexicana. Fue un hombre generoso, un gran ser humano, con sus alumnos y sus compañeros de generación. Tenemos que honrar su memoria”, concluyó la directora general del INBA.

 

Por su parte, Francisco Padilla, padre del escritor, afirmó que su hijo dejó varios textos pendientes, “que ya irán saliendo y los daremos a conocer, porque sus hijos encontrarán muchas cosas. Pocas personas como los periodistas lo llegaron a conocer tan de cerca. Era una persona fuera de serie. Ha sido una gran pérdida, no nada más para la familia, sino también para mi patria. Será un ejemplo reconocido cada vez más”.

 

El ensayista Adolfo Castañón aseveró que Ignacio Padilla “era una persona muy veloz, en términos intelectuales, y se fue con esa velocidad. Su genio, tratando de ser objetivo más allá de la circunstancia, tiene que ver con una inteligencia e inspiración alimentada por la analogía, el contraste y la capacidad de poner las semejanzas y las diferencias de Cervantes y Shakespeare, del mundo contemporáneo y el de las ideas; de relacionar y vincular las partes perdidas o dispersas de la cultura y las letras contemporáneas. Es un autor que habrá que releerse”.

 

Jaime Labastida, director de la Academia Mexicana de la Lengua, refirió que “la Academia en su conjunto está en verdad consternada. Es lamentable la muerte de cualquier académico, pero en el caso de Ignacio Padilla, que era un hombre que estaba en pleno desarrollo, que había alcanzado apenas su madurez y que prometía muchísimo, pues es todavía más lamentable. Al carácter de gran escritor de Padilla hay que sumar que era un hombre de una tranquilidad, bonhomía e, incluso, humildad dignas de ser reconocidas”.

 

Moisés Rosas, titular de Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, señaló que Padilla fue un gran creador con mucho futuro, y coincidió con los entrevistados en resaltar su talento como escritor y su calidad como ser humano.

 

“Fue miembro del Sistema Nacional de Creadores y tuvimos la fortuna de tenerlo como jurado hace apenas unos cuantos días. Venía pensando en la amistad entre Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez El Nigromante y Payno. Estos grupos, como el Ateneo de la Juventud, los Contemporáneos y otros, a lo largo de la historia cultural de nuestra país han dejado una huella muy profunda. Además de sus compañeros y amigos tan cercanos del Crack como Volpi o Pedro Ángel Palou, Nacho Padilla representará siempre una etapa de la historia cultural de México. Estos autores, que ya han publicado mucho, representan la voz de la sociedad y del tiempo que nos tocó vivir”, finalizó Rosas.