***  Para Yunuén Esmeralda es importante plasmar experiencias cotidianas para poder encontrar ese otro lado que nos da a conocer nuevas interpretaciones y significados

***  “Somos ese Adán hecho de barro que terminará vuelto polvo algún día”.

 Revelar el otro lado de lo cotidiano es uno de los principales objetivos que motivó a Yunuén Esmeralda a escribir su más reciente libro, Aromarena, que trata de encontrar, a través de la palabra, esos pequeños pero significativos descubrimientos que se dan en la vida diaria.

La presentación del libro  Aromarena, de Yunuén Esmeralda, correrá a cargo de Óscar Wong, Kari Cerda, María Andrea Giovine y la propia autora, con la moderación de Juan Francisco Benavides Sola, este miércoles 3 de agosto a las 19:00 horas en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes. Entrada libre.

Este libro es la representación de cinco años de trabajo en los que Yunuén Esmeralda plasma la sabiduría que se puede encontrar en hechos cotidianos, tal como lo adivinó después de leer la obra del escritor norteamericano Robert Frost, de quien es admiradora y se sintió fuertemente influenciada al escribir estos poemas.

Aromarena se encuentra dividido en cuatro apartados, “Lo inasible”, “Aromarena”, “Temblores” y “Umbral”, en los que hay reflexiones entorno a temas que van desde el amor, el tiempo ligado a la vida y a las decisiones que tomamos, las ausencias y las  nostalgias causadas por las pérdidas, como en el poema “Sobre esta roca tallada con tu rostro”, en el que, dice Yunuén Esmeralda, pasaba por el cierre de un importante periodo en su vida.

Algunos poemas que forman parte de Aromarena, se encuentran plagados de elementos marinos justamente porque la autora es una gran admiradora del mar y los horizontes como representación de la vastedad y lo infinito. “Me siento cercana a esos elementos. Es un poco esa visión romántica; te das cuenta que eres inmensamente pequeño frente a la inmensidad y que al mismo tiempo formas parte de ella”, expresa en entrevista.

Para Yunuén Esmeralda es importante plasmar, a través de su poesía, experiencias cotidianas para poder encontrar ese otro lado que nos da a conocer nuevas interpretaciones y significados. En “Ronda de los ancianos”, poema que destaca, habla de qué tanto nos vamos haciendo más sabios mientras tenemos más edad y qué tanto nos llenamos de más miedos, porque, asegura, hay una parte de nosotros que siempre será un niño que se la pasará jugando; “somos ese Adán hecho de barro que terminará vuelto polvo algún día”, asevera.

Uno de los motivos que logró acercar a Yunuén Esmeralda con la poesía, fue querer transformar sus emociones y sensibilidad desbordada en otra cosa, “Entenderla y sobre todo darle forma”. “Eso es la poesía, es la manera de darle forma a todo ese caudal lírico que uno lleva dentro, es mi visión del mundo, mi sentir del mundo que se va convirtiendo en esas imágenes, en esas palabras y en esos poemas”.

Yunuén Esmeralda (ciudad de México, 1982), recibió cursos de pintura y coro en el Centro Regional de Cultura de Cuautitlán Izcalli. Fue becaria de la Secretaría de Educación Pública en 2006 cuando laboró como lector extranjero de español en París, Francia.

Asistió al taller Gilberto Owen, dirigido por el poeta chiapaneco José Falconi en 2007. Forma parte del curso del poeta Oscar Wong. Ha publicado Vértigo y fruto (2008) y Aromarena (2010)